Parece increíble que ya hace una semana que regresamos de nuestro viaje por la Riviera Maya en donde asistimos al TBEX, vaya que el tiempo pasa rápido.
Para nuestro regreso a casa lo hicimos por medio de dos de las aerolíneas low cost más importantes de México, Volaris y Vivaaerobus.
El primer trayecto fue saliendo de Cancún rumbo a la ciudad de Monterrey por medio de Volaris. Todo el vuelo salió muy bien de principio a fin, desde el momento en que hicimos la reserva, el proceso de documentar el equipaje en el aeropuerto, el abordaje al avión, y la puntualidad con la que partimos y llegamos a la primera parada.
En la ciudad norteña esperamos unas 3 horas para tomar el vuelo final rumbo a Juárez el cual sería por Vivaaerobus. En esta ocasión, desde el principio las cosas no empezaron a salir tan bien. El mostrador para documentar equipaje empezó a atender clientes hasta una hora y media antes de que saliera el vuelo, osea 30 minutos retrasado.
Luego procedimos a abordar y despegamos ajustadamente con el tiempo pactado. El vuelo iba bien hasta que nos aproximamos a nuestra ciudad, en donde las condiciones meteorológicas no eran las óptimas para aterrizar ya que caía una lluvia considerable. De hecho tuvimos que ser desviados a la ciudad de Chihuahua en donde aguardamos alrededor de una hora en el aeropuerto en espera de que pasara el temporal.
Tomamos camino y esta vez, aunque aún llovía, pudimos aterrizar al fin en el aeropuerto de nuestra ciudad. El único detalle es que eran 3 horas y media de retraso con lo esperado. En esta ocasión la culpa no fue de la aerolínea por que se debió al mal tiempo. Pero que pasa en estos casos? que hubiera sido de nosotros si el vuelo se hubiera cancelado, nos hubieran acomodado en un hotel en Chihuahua? Si hubiera sido un vuelo de conexión en nuestra ciudad, y lo hubiéramos perdido, quien nos hubiera respondido con los gastos de cancelación ocurridos?
Esas son las preguntas que nos hicimos mientras estuvimos varados dentro del avión en la pista del aeropuerto, ¿quién hubiera pagado los platos rotos?
En Europa hemos sabido que cuando se dan situaciones de ese tipo, los pasajeros tienen derecho a reclamar, e incluso a recibir algún tipo de compensación por lo ocurrido. Existe un portal del que nos hablaron colegas bloggers en que se puede buscar a qué es acreedor el pasajero en caso de verse afectado por algún incidente durante el vuelo, el sitio se llama Flightright.es y su plataforma es fácil de usar.
Aquí en México el organismo que se encarga de regular este tipo de situaciones relacionadas con los viajeros, es la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO). Ellos proporcionan la información necesaria sobre la protección y derechos de los pasajeros. Entre los asuntos que regula la dependencia incluye:
- Que le respeten las tarifas
- Sobreventa de boletos
- Contratiempos
- Pérdida de equipaje
- Seguro de viaje
Para mayores detalles puedes consultar el archivo de la PROFECO en el que se explica con más detenimiento lo que cubre en cada caso particular. Así como es importante el tener en cuenta los derechos que tiene uno como pasajero, también es importante saber las obligaciones de uno. Estar al tanto de ambos conceptos te ahorrará muchos dolores de cabeza en caso de que ocurriera algún imprevisto con la aerolíneas.